«Soy un hombre enfermo… soy un hombre despechado. Soy un hombre antipático. Creo que padezco del hígado.»

Una primera parte de Apuntes del Subsuelo fue publicada en el proyecto de Época (Epoja), una revista de corta vida, iniciativa de Dostoyevski. En 1864 aparece públicamente todo el libro; coincidencia o no, es un año coyunturalmente duro para Dostoyevski por la muerte de su primera mujer, tuberculosa, y de su hermano, por la ruina en la que está sumido debido a las deudas y por la epilepsia que se le acentúa cada vez más. Pero hay un evento, ocurrido años antes, decisivo y de clara influencia en el tema del libro; la condena pagada en Siberia con trabajos forzosos por contrariar al socialismo zarista imperante en la Rusia de su tiempo. Parece que Dostoyevski nos hablase a través de su personaje desde el subsuelo de su cárcel: “¿De qué puede hablar un hombre honrado con mayor satisfacción? Respuesta: de sí mismo. Pues bien, hablaré de mí mismo.”

Es así como el personaje anónimo de Apuntes del Subsuelo nos empieza a hablar con una elocuente y estupenda narrativa en forma de monólogo de sus sentimientos, pensamientos, despecho, rencores y enfermedad.

Es en Apuntes del Subsuelo donde aparece el primer antihéroe de la literatura moderna, situado en Petersburgo, ciudad que considera “la más abstracta e intencional de todo el globo terráqueo (las ciudades pueden ser intencionales o no intencionales)”.

Apuntes del Subsuelo está compuesta de dos partes bien definidas. Una primera enfocada al diálogo del protagonista con el lector, llena de matices, con un audaz manejo de la palabra, autoflagelante, que muestra claramente su rencor, despecho e intranquilidad con la sociedad.; la segunda parte es un relato “a propósito del agua nieve”, aparentemente intrascendente pero de una marcada notoriedad en la vida del protagonista.

Algunos críticos se inclinan por decir que el libro es de las obras menores de Dostoyevski, otro, por el contrario, lo consideran el prólogo de las obras mayores. Sin lugar a dudas marca un cambio con respecto al tipo de novela que escribía el autor. Ésta es una novela filosófica oscura que encanta por la reflexión hacia el hombre e invita a adentrarse en el subsuelo de Dostoyevski.